En este post analizamos uno de los problemas psicológicos más recientes y novedosos, el de las adicciones a las redes sociales. Es un problema propio del siglo XXI que poco a poco se va tratando con más rigor y datos científicos.
De acuerdo con la propia Comisión Europea, al menos el 5 % de los jóvenes sufren síntomas de adicción a las redes sociales. Los resultados preliminares de una investigación sobre los hábitos mediáticos de los jóvenes llevada a cabo en la Universidad de Ámsterdam revelan esta cifra.
En una entrevista a Marian García, psicóloga especializada en adicciones, revela que los menores no tienen suficiente capacidad crítica para seleccionar y entender lo que sucede. Junto con la influencia del medio, esto hace que la toma de decisiones esté muy condicionada.’
Cómo se produce la adicción de los jóvenes a las redes sociales
Se sabe que tanto los adolescentes como los adultos comprueban sus teléfonos más de 150 veces al día, y está bien documentado que nuestro acceso excesivo a las redes sociales y nuestra obsesión por nuestra apariencia online han tenido un impacto significativo en los adolescentes, incluyendo graves problemas de autoestima y sentimientos de ansiedad.
La adicción a los medios sociales no sólo afecta directamente a los procesos cerebrales y químicos de un adolescente, sino también a otras áreas de su vida. Los estudios sugieren que cuando un adolescente se centra únicamente en sí mismo y en mostrar su «mejor yo», en realidad reduce su autoestima.
Los adolescentes tienden a compararse con los demás en Internet. Esto es especialmente peligroso, ya que no sólo reduce la autoestima, sino que también puede provocar depresión, trastornos alimentarios, conductas autolesivas y abuso de sustancias.
Qué causa la adicción a los medios sociales
1. Adicción
Las redes sociales -y los medios de comunicación online en general- son adictivos en cierto sentido de la palabra. Las empresas que gestionan las aplicaciones de redes sociales y los sitios web de más éxito en la actualidad trabajan duro para mejorar y aumentar la cantidad de personas que pueden atraer a su plataforma, además de maximizar el tiempo que una persona pasa en ella.
Cuanto más tiempo pase una persona, más anuncios podrán publicar y más probabilidades tendrán de obtener beneficios de su producto. Al final, es una cuestión de negocio, y cualquier gran plataforma online está construida para conseguir una eficacia brutal a la hora de conseguir que la gente se quede.
2. Estrés y autoestima
Las redes sociales a menudo hacen que la vida de una persona parezca mucho más emocionante y seductora que la tuya, además de hacer que parezca mucho más emocionante y seductora de lo que realmente es. Esto puede aprovecharse gravemente del sentido de competitividad y pertenencia social de las personas, haciéndolas sentir a menudo superadas o menos atractivas.
3. Ansiedad social
Para las personas que tienen dificultades para mantener una relación o comunicarse en persona, las redes sociales proporcionan el entorno perfecto para comunicarse y expresarse. Aunque esto es positivo, en general no es sano evitar abordar los principales problemas de ansiedad social, sobre todo debido a todos los efectos emocionales y físicos negativos del tiempo excesivo frente a la pantalla y del consumo online.
Cómo tratar la adicción a las redes sociales
De acuerdo con Orbium Adicciones, centro psicológico especializado en adicciones, es fundamental que los padres vigilen a los menores. Los menores no saben diferenciar entre el contenido útil y el peligroso, así que debemos enseñárselo nosotros.
Con el fin de prevenir posibles problemas, debemos tener mucha presencia y ser los conductores de nuestros hijos. Es importante ayudarles a desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas.
Por ejemplo, fomentar aficiones que ayuden al adolescente a mejorar mental o físicamente, la meditación y actividades espirituales son métodos que ayudan a afrontar eficazmente los problemas, convirtiéndose en salidas para el estrés y ayudándole a encontrar una perspectiva sana con la que afrontar sus problemas. Las estrategias más efectivas son:
1. Gestiona el tiempo frente a la pantalla
Internet debe utilizarse como una herramienta, y los medios online como una fuente de entretenimiento o información. Pero cuando los medios online se convierten en lo que preocupa a tu hijo adolescente a casi todas horas del día, se vuelve sencillamente incapaz de pensar o concentrarse en otra cosa.
Controlar el tiempo que un adolescente pasa frente a una pantalla y animarle a que lo haga por sí mismo, por su propia salud y su futuro, es fundamental.
2. Pasar un tiempo alejados de las redes sociales
El tratamiento de la adicción a las redes sociales requiere pasar tiempo alejados de las redes sociales -y de los medios online en general-, así como centrarse en ayudar a los adolescentes a afrontar las repercusiones de su adicción, enfrentarse a las posibles causas de su comportamiento adictivo e identificar métodos que puedan ayudarles a limitar mejor su uso de las redes sociales y a mantener una relación más sana con los medios online.
3. Terapia psicológica
La psicoterapia con un profesional puede ayudar a los adolescentes a disociarse de su comportamiento y a darse cuenta del daño que les ha estado haciendo a ellos y a los demás. Se puede argumentar que los adolescentes viven con conceptos diferentes de comunicación e interacción gracias a Internet, pero las investigaciones han demostrado que el uso excesivo de los medios online tiene graves consecuencias negativas para la salud mental.
Comprendiendo el daño que se ha hecho -y por qué se hizo en primer lugar-, los adolescentes pueden seguir adelante y encontrar formas de equilibrar sus medios online con la vida.
4. Terapia familiar
A veces, ayuda trabajar no sólo con el adolescente, sino también con su familia. Una sesión de terapia de grupo puede ayudar al resto de la familia a comprender mejor por lo que está pasando el adolescente, así como a identificar métodos para ayudarle.
Implementar cambios en toda la familia también puede ayudar al adolescente a afrontar mejor su problema y fomentar un uso más sano de los medios online en toda la casa.
5. Otros tratamientos
Aunque la terapia psicológica es la base de la recuperación, existen tratamniebntos complementarios para ayudar a introducir al adolescente en determinados mecanismos de afrontamiento, y tratamientos alternativos como la meditación, el yoga y otros.
Si a un adolescente se le diagnostica un problema distinto, o si muestra síntomas de ansiedad y/o depresión, un psiquiatra también puede emplear métodos de tratamiento para estos trastornos, incluyendo potencialmente medicación si es necesario.
Como conclusión, el problema de la adicción a las redes sociales en jóvenes es un problema que los padres deben de tomarse muy en serio, ya que es un fenómeno creciente con complicaciones psicológicas que pueden derivar en cuadros muy graves si no se tratan a tiempo.
